En la lucha global contra el cambio climático, la contaminación y la intrusión humana, las tortugas marinas emergen como víctimas involuntarias. Estas criaturas milenarias, que han navegado por nuestros océanos durante más de 100 millones de años, ahora se encuentran amenazadas en todo el mundo, y Canarias no es una excepción.
SOS Tortugas Marinas es una llamada a la movilización colectiva para despertar la conciencia y fortalecer el compromiso con la salvaguarda de estas majestuosas criaturas y su delicado hábitat. Promovida por la Fundación DIARIO DE AVISOS, esta iniciativa se ha erigido como un estandarte en la batalla contra los estragos del cambio climático y una herramienta tanto educativa como divulgativa destinada a sensibilizar a toda la sociedad, en especial a las generaciones más jóvenes.
Durante la jornada de ayer, dos ejemplares de tortugas Caretta Caretta, más conocidas como tortugas bobas, fueron devueltas al mar en la playa de La Nea, en el municipio tinerfeño de El Rosario, después de haber sido rescatadas y rehabilitadas en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre La Tahonilla, dependiente del Cabildo de Tenerife. Bajo la atenta mirada de un pequeño grupo de familias, sobre todo la de los más pequeños, el personal dedicado al cuidado de estos ejemplares explicó con detalle la historia que hay detrás de cada tortuga recuperada, los peligros que las amenazan y el tratamiento que han requerido para recuperarse de las diversas heridas y daños que presentaban cuando fueron salvadas.
En muchas ocasiones, las tortugas requieren de largos procesos de rehabilitación, cuidados e intervenciones quirúrgicas, debido a la ingesta de plásticos, que confunden con alimento, o debido a los desechos plásticos, aparejos de pesca o redes que se arrojan indiscriminadamente al mar, también conocidas como “redes fantasma”, que representan un peligro considerable, ya que las tortugas quedan atrapadas y mueren por asfixia o agotamiento, o en el mejor de los casos sufren la amputación de extremidades.
Así lo explicó el responsable del programa educativo de La Tahonilla, Lisardo Cejas, que también relató con detalle cómo una de las tortugas que se pondría en libertad minutos después tuvo que ser intervenida debido a las heridas que presentaba al ser rescatada en aguas de Tenerife, perdiendo una de sus aletas. Todo ello consecuencia del abandono de bolsas de rafia y redes en el medio marino, suponiendo un grave peligro para esta y otras especies que habitan en nuestras aguas.
La jornada contó también con la participación de diversas autoridades que mostraron su apoyo a la labor que se realiza desde la Fundación. Blanca Pérez, consejera de Medio Natural, Sostenibilidad, Seguridad y Emergencias del Cabildo de Tenerife, manifestó la importancia de la realización de actividades como esta para enviar un mensaje de concienciación a la población, para que cada persona en su día a día pueda realizar acciones responsables para el cuidado de nuestro valioso medio ambiente, tan importante tanto para los animales como para las personas.
Por su parte, el alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, que asistió junto al edil de Transición Ecológica, Fidel Vázquez, puso en valor la iniciativa de la Fundación DIARIO DE AVISOS, agradeciendo su implicación en proyectos relacionados con la preservación y la sensibilización, así como el compromiso de su municipio con la preservación del medio natural a través de diversas iniciativas.
Priscila González, directora de proyectos de la Fundación DIARIO DE AVISOS, enfatizó la trascendencia de esta actividad, no solamente por el valioso acto de devolver dos tortugas a su entorno natural, sino también por la oportunidad que representa para hacer visible la problemática existente: “Esta acción surge a partir de la urgencia de fomentar un mayor grado de consciencia ecológica en la sociedad. Se busca implicar a las personas, crear conciencia acerca de la significativa influencia de la contaminación en el medio marino y su biodiversidad. La Fundación DIARIO DE AVISOS está absolutamente comprometida en impulsar proyectos que fomenten un cambio de perspectiva y la generación de acciones que tengan un impacto positivo en el cuidado y preservación del medio ambiente”.
La jornada finalizó con la suelta de ambas tortugas a orillas de la playa, que rápidamente nadaron mar adentro para volver a su hogar. Los asistentes presentes en tan mágico momento rompieron el silencio con un caluroso aplauso, como gesto de celebración de tan emotivos instantes.